¿Qué es la hipoplasia dental?

¿Qué es la hipoplasia dental?

La hipoplasia es una enfermedad de los dientes que hace que estos tengan menos esmalte dental de lo común. Esta alteración se produce durante el desarrollo del diente y, más concretamente, en el proceso de formación del esmalte.

Esta puede producir tanto a manchas blancas o marrones como a surcos en los dientes.

En función de la severidad del defecto, estas señales pueden ser prácticamente inapreciables o muy visibles, otorgando al diente un aspecto dañado y deteriorado.

Causas y consecuencias de la hipoplasia del esmalte

La hipoplasia se origina en el desarrollo de la estructura del diente, por tanto esta se ocasiona por alguna situación que la propicie. Algunas de estas situaciones son como la malnutrición, una infección, la fiebre o una enfermedad. 

Al ser una enfermedad que se ocasiona durante el crecimiento, y puede ser originaria de muchos motivos diferentes, muchas veces no se sabe cual es el motivo real que la originó.

Y aunque las causas no se conozcan en cada caso, es importante conocer las consecuencias. Al dañar el esmalte dental, se daña la capa protectora del diente, y por tanto hay menos protección hacia los agentes externos, y por tanto es más propenso el diente a sufrir enfermedades periodontales o caries.

Tratamientos

Según el grado en que se encuentre la enfermedad hay diferentes soluciones:

  • Sellado dental: Los sellantes dentales sirven para proteger la superficie afectada por la hipoplasia y se utilizan cuando los signos de ésta son muy leves.
  • Blanqueamiento dental: Se lleva a cabo cuando las manchas en los dientes son blancas. De esta manera, el blanqueamiento dental consigue que todos los dientes tengan un color más uniforme.
  • Microabrasión dental: Este es un tipo de tratamiento al que se recurre cuando las manchas son severas. Consiste en pulir la capa del esmalte que está dañada, de manera que eliminamos la mancha. Después, la capa del diente pulida se rellenará con composite.
  • Carillas o coronas dentales: Cuando el daño es muy severo, será necesario recurrir a otras soluciones como las carillas o las coronas dentales.
  • Implantes dentales: Los implantes serían el último recurso que se debería utilizar, ya que lo más recomendable para el paciente es que seamos conservadores con sus dientes. Sin embargo, cuando el deterioro de la pieza dental es extremo, sí es necesario contemplar la posibilidad de extraerla y colocar un implante.


Ramon Perez mié, 10 abr, 15:45 (hace 6 días) para mí